" En Japón aumenta el número de personas que abandonan las zonas
rurales.
Una investigación gubernamental en Japón revela que la densidad
poblacional en Tokio y en sus alrededores continúa aumentando, en tanto
que en muchas otras regiones se presenta el fenómeno contrario.
Según
el estudio efectuado por el Ministerio del Interior y de las
Comunicaciones acerca de las migraciones internas, el año pasado
540.015 personas trasladaron sus residencias a Tokio y tres de las
prefecturas vecinas.
El número de personas que llegaron a la
zona excede en 155.150 el de individuos que abandonaron el área. El
Ministerio dice que esta cifra ha superado los 150.000 por primera vez
desde 1987.
Entretanto, en 40 prefecturas, tales como Aomori,
Akita y Nagasaki, muchas más personas dejaron estos lugares de las que
llegaron para vivir en ellos. "
NHK 30/04/08
A casi
17 años de ser estrenada Omohide Poro poro (20/07/91) el tema es
actual. Omohide Poro poro que vendría a ser algo así como “goteo de
recuerdo” en ingles se llama Only yesterday, en el poco japonés que
logre aprender recuerdo que algunos sonidos en japonés llegaban a
convertirse en verbos, a mi mente me llega el de dokidokisuru que era
algo así como latidos del corazón pero en verbo, algo interesante que
tal vez luego retome.
Bueno esta película que en esta ocasión
quiero comentar Omohide Poro poro es uno mas de los trabajos de Studios
Ghibli y fue dirigida por uno de los fundadores y a mi personal opinión
no muy reconocido director de Ghibli, Isao Takahata que quizás nos
llegue a la cabeza por su impresionante trabajo en la cruel y
desgarradora historia de los hermanos huérfanos en Hotaru no Haka
(Grave of the Fireflies).
El trabajo de Takahata me es muy estimulante,
ya que sus obras en estudios Ghibli me han parecido de excelente
manufactura al grado de no tener casi nada que ver con la del estudio,
en las tres películas que he podido ver Hotaru no Haka, Heisei tanuki
gassen pompoko (Pom poko) mmm… desgraciadamente aun no ha caído en mis
manos Hôhokekyo tonari no Yamada-kun o mejor conocida como My Neighbors
the Yamadas sus propuestas arguméntales no dejan de tener su mensaje;
Hotaru la adaptación de una novela en la cual el sufrimiento de los
niños es solo comparable con la antipatia de ser otro mas, Pompoko y su
grado de implementar la tradición japonesa poniendo en una irreal pelea
a los hombres invasores contra los mapaches y su lucha por subsistir y
mantener su hogar, así como Omohide tomando un manga de tres volúmenes
e integrando el problema del campo japonés.
El
manga de Omohide Poro poro de la mangaka Hotaru Okamoto, que por cierto
se editara próximamente en España; narra lo que es la juventud de Taeko una
niña de 11 años en una parte importantísima de Japón, la cual es el
Japón de finales de los 60 recuerdos de niñez, programas de TV, música
Enka (música tradicional japonesa) y la trepidante recuperación de un
Japón en vísperas de ser una potencia industrializada.
Takahata
hace de tres volúmenes de un manga de historias cortas, un argumento
bastante solidó, de tal forma que tenga un sentido y a su vez
complementándolo con una Taeko “actual” en el proceso de encontrarse a
si misma, se puede tener un trabajo y una carrera pero no una noción de
que es lo que quiere uno en realidad. Así su viaje a los campos
japoneses la sacan de ese hastió de la vida urbana y un trabajo
monótono, mostrándonos una vida que pocas veces no se aprecia, el
trabajo campo japonés, en especial en la producción del cártamo.
Aquí
es donde aparece Toshio un joven que busca en el campo la realización
de su proyecto personal de vida.(la agricultura orgánica) esta anécdota
es muy rara, hace algunos meses viendo la TV me encontré con un
programa de la NHK que trataba sobre la mayoría de edad (en Japón es a
los 20) y los retos de estos nuevos adultos, en uno de los casos eran
dos compañeros de universidad que en sus fines de semana se dedicaban a
una pequeña parcela de productos orgánicos, dentro de los problemas que
se encontraba es el de encontrar una tierra de cultivo propia (amenos
que se casaran con alguna hija de agricultor). El campo japonés no
dista mucho de los problemas del campo de otros países (ser abandonado
por mejores oportunidades de vida).
La música es un caso
aparte ya que no tiene participación del que podría ser compositor
exclusivo de Ghibli, Joe Hisaishi, (pensándolo bien el no ha trabajado
para ninguna película de Takahata), pero cuenta con mucha música que en
esa época se escuchaba en la radio nipona también música Italiana,
Húngara, Rumana pasando por una readaptación del tema The Rose que
cantara Bette Midler tema compuesto por Amanda McBroom para la película
del mismo nombre que cuenta la vida de Janis Joplin.
Los
beneficios de usar animación para crear una historia podrían parecer
ilimitados, siempre y cuando el director sea el adecuado.
No queda mas que dejar a su consideración Omohide Poroporo (Only yerterday) para las películas por ver.
Hasta pronto.
O no???…
MAP El Rey del Conocimiento Inutil.