Ya sabemos que a los nipones los tentáculos siempre les han fascinado, Urutsikidoji, la Blue Girl etc, esta temporada los tentáculos regresaron, pero no en esa sodomita forma en la que ya nos tienen acostumbrado en Japón.
Dos de los nuevos animes de esta temporada nos traen a Un calamar y a una medusa. Por ahora me centrare en Kuragehime o Princess Jellyfish.
Nos encontramos con Tsukimi Kurashita una pueblerina que vive en Tokyo, una aficionada a las medusas que vive en una casa de huéspedes junto con todas sus amigas Otakus, en una especie de congregación. Cada una de las integrantes es aficionada ha algo en especial:
Tsukimi es una gran conocedora de todas las clases de medusas.
Mayaya una fanática del romance de los tres reinos.
Banba-san es una fan de los trenes.
Jiji-sama es una frecuenta asidua a los cafés temáticos.
Chieko es una confeccionadora y adoradora de los kimonos
Todas ellas relacionan su afición y la trasladan a la vida cotidiana y dentro de su claustro (la casa de huéspedes) crean un mundo utópico en el que se desarrollan.
Pero el mundo de Tsukimi se derrumba cuando conoce a una “tipica” mujer a la moda japonesa (enemiga natural de su clan de otakus femeninas) la cual le ayuda a salir de un problema pero ella es un el.
El opening de la serie es una mezcla de películas, bailando bajo la lluvia, el graduado y el juego de la muerte aparecen entre ellos.
Producido por Brain Base, la cual han lanzado animes como Gunparade Orchestra, Kurenai, junto con su equipo que trabajo en Durarara, hacen un buen anime que promete más enredos y diversión. La serie se planea que tenga una duración de episodios de los cuales a la fecha han salido cuatro
Dirección: Oomori Takahiro (Durarara, Baccano, Haibane Renmei, H2).
Diseño de personajes: Hayama Kenji (Durarara, Baccano, Makai Tenshou, Mazinkaizer).
Música de Yoshimori Makoto (Durarara, Baccano).
