Studio Ghibli: Cosplay

En esta ocasión tenemos el agrado de compartir una sesión de fotos con el tema de las películas hechas por el equipo de Hayao Miyazaki.  La cual se llevó a cabo en el parque Masayoshi Ohira ubicado muy cerca del metro General Anaya en la Ciudad de México y que es un jardín típico japonés.

Gracias a Alisz Cosplay por la organización.  

Princesa Mononoke

Porco Rosso

Kiki’s Delivery Service

El Increíble Castillo Vagabundo

El viaje de Chihiro

 

 

Doblaje mexicano, convenciones y agencias de representación

Hace un par de años, conocí por medio de una bolsa de trabajo a una agencia de talentos que buscaba colaboradores específicamente para el área de ventas. Nos citaron a los aspirantes en la FrikiPlaza, una tarde de sábado y después de escuchar que se dedicaban a representar a actores de doblaje y a cosplayers, grupos de música, etc, la cosa sonaba prometedora, entonces  yo y otro compañero nos embarcamos en esta extraña aventura. Poco a poco se fue complicando el asunto porque no sólo pedían que les ayudáramos en las ventas, sino que también solicitaban los «directivos» de esta agencia que se realizaran estrategias, planes de mercadotecnia, todo esto claro con un salario que nosotros mismos íbamos a sacar de nuestras grandes ventas y dicho sea de paso, estas ventas serían originadas dependiendo de cuántos eventos y convenciones les consiguiéramos a los actores de doblaje, a las chicas que hacen cosplay y a los demás artistas.

Se presentó un primer foco de alarma para mí cuando nos convocaron a la TNT de Febrero de 2015, porque al terminar la jornada en donde ayudamos a un fotógrafo (que es pareja y gerente de la directora de esta agencia) no nos pagaron un dinero que nos habían prometido y nada más nos dieron una torta y un refresco como si fuera mitín partidista, la verdad yo sí reclame al individuo está situación pero se hizo el loco. En la semana que siguió ayude a esta agencia a hacer unas cosas y me dieron 100 pesitos por mi ayuda. Ya desde ahí yo me dediqué a los actores de doblaje y el otro chico a las cosplay, me comentaron que conocidos actores que hacen doblaje de Madagascar cobran cada uno, 30 mil pesos por presentación en eventos y bueno empecé a visualizar la realidad que permea todos los ámbitos en México que se llama desigualdad porque hay otros actores de doblaje que no cobran lo mismo, claro, dirán algunos es que algunos actores que participaron en el doblaje de   Madagascar no son cualquiera y yo no niego la calidad del trabajo porque a mi me gustó bastante, porque yo tenía un plan de organizar a los actores por series como se hace en Japón, yo actuando de inocente y creída, y no se iba a poder llevar a cabo porque primero los tabuladores no eran iguales y que cada actor lo manejaba a su propia conveniencia.

Entre dimes y diretes surgió una oportunidad de viajar a Tampico para una convención de anime con transporte y alojamiento pagado, ahí me embarqué yo y la «directora» de la agencia, su pareja y su hija, llegamos a Tampico, al hotel pudimos conocer el mar, comida típica, una taquiza en la convención. Me salvé de hacer de niñera de la hija de la «directora» de la agencia, pude irme de paseo porque además era mi cumpleaños y quería disfrutarlo a mi aire. Lo cual sí logré. Conocí el centro de Tampico, la Laguna del Carpintero, y el Museo de la Huasteca.

Nota: Por cierto antes del viaje había escuchado que los «directivos» hacían planes de que ellos se iban a ir a la playa porque yo ya iba a ir con ellos y me iba a encargar del puesto de chácharas que tenían en la convención, a lo que yo protesté diciendo: ¿yo nada más voy a estar trabajando? ahí me dijeron: ¡Ah no! ¡Sí, podrás irte a pasear! Lo cual comprobé al final que no les gustó nada y además yo no tenía ningún pago en metálico pero eso sí debería de estar más comprometida con la «causa». O sea trabajar como mula, gratis y sin chistar.

Lo que yo observe en general en la convención es que en primera a los chavos les cobran muy caro la entrada y les queda poco para consumir adentro. En su mayoría lo que se expone ahí lo llevan personas de la Ciudad de México que hacen el largo viaje para vender sus productos que van desde mochilas serigrafiadas, camisetas, y demás parafernalia. La venta en esa ocasión estuvo baja me tocó conocer el caso de una mujer que se regresó casi con toda su mercancía. Pude ver una presentación de un actor de Los Simpson y me di cuenta que como en México tenemos una industria de generación de contenidos inexistente, a excepción de ciertos vloggeros, pues los actores que pudieron hacerse más famosos debido a personajes de animaciones tanto estadounidenses o japonesas, se casaron con un personaje y obvio es el que les da más dinero y reconocimiento pero los siento como si fueran locomotoras de vapor sacando humo negro, la verdad yo sí tenía mucha expectativa por ver al actor en el escenario, pero no me impresionó.

A la par debo de mencionar que no fui presentada en ningún momento a nadie, y me tomaban como la «secretaria/chacha» del intento de «directora», por lo cual se me tenía prohibido acercarme o socializar con los actores porque la mujer los protege como niños de pecho y en lo cual también me enteré que el Sr, actor de los Simpson, no quiso viajar con nosotros de regreso en la camioneta en la que nosotros volvimos, la verdad no recuerdo exactamente que dijo pero sí mostró molestia ante tal hecho.

Me interesa hacer mención con esta cuestión de los egos que tienen muchas personas en el medio del entretenimiento mexicano, la verdad si bien en algunos casos la calidad histriónica es palpable, la verdad es que en muchos casos lo que se les olvida es la humildad, de que al fin y al cabo no eres un dios sino que tienes un trabajo y tienes la suerte de ser reconocido, pero definitivamente hasta un grupito que baila canciones coreanas se sienten que ya están en la cúspide y que los demás mortales somos inferiores. ¡Es terrible!

La agencia de representación de estos artistas, han intentado legalizarse sin embargo por cuestiones de que los actores no quieren que el fisco se entere, pues han de seguir en el limbo y pues tienen que estar trabajando en las sombras. Y la verdad sí les afecta porque no pueden manejar mejores condiciones para ellos mismos y para sus futuros empleados, además de que tienen que mantenerse de otras formas como tener puestos de dulces o sacar fotos en convenciones, aún así defienden a ultranza que el «negocio» SÍ deja.