EXTRA!!!!! SE ENCUENTRA CUERPO DESPEDAZADO COLGANDO DE LA VENTANA!!!!!
México, D.F.- Ayer, aproximadamente a las 4 de la mañana, fué encontrado el cuerpo sin vida de un hombre de aproximadamente 23 años de edad. Las fuentes indican que se trataba de Santiago Rojo, quien apenas llevaba unos meses viviendo en el lugar. El cuerpo estaba completamente despedazado, con la mitad del cuerpo colgado del barandal del pequeño balcón de su departamente ubicado en la calle Sinaloa, casi esquina con Puebla, en la Colonia Roma. Según peritos de la Secretaría de Seguridad Pública del D.F, alguna clase de animal debió ser el que cometió este terrible asesinato.
"No hay pruebas fehacientes de que el joven tuviera ningún tipo de animal. Creemos que se trató de una especie de ataque por parte de una persona usando un animal muy grande. Lo que ahora investigamos es qué clase de animal pudo causar tales heridas, y haremos las averiguaciones correspondientes."
Según reportes de los vecinos, el joven Santiago padecía de los nervios, y muchos de ellos aseguran que tenía cierto grado de deliro de persecución, puesto que aseguraba que lo perseguín para matarlo.
Dentro de su casa se podían observar diversos artículo de origen místico o esotérico, al igual que el las ventanas y las puertas estaba rociadas con sal. Espantaespíritus colgaban del techo y varios artículos masónicos y de santería, al igual que de otras varias religiones estaban desperdigados por todos lados. Se rumora que practicaba la brujería...(Continúa en la página 5...)
Al poco tiempo después del terrible acontecimiento, uno de sus amigos encontró un texto escondido en el librero. Había ido a revisar unas cosas que le dejó en herencia, y lo encontró. Lo ha estado transcribiendo desde entonces, pero la letra está muy garrapateada y en muchas partes no se entiende muy bien. Me está dando los textos conforme los está transcribendo. No me los quiere dar porque es el único recuerdo que tiene de él, cosa que comprendí bien y que respeto.
Lo estuve leyendo, y no puedo evitar en pensar que si esto sucedió en realidad, compadezco las almas de las personas que participaron en esa extraña y macabra aventura...
Texto 1:
Yo le he visto la cara al demonio, me he enfrentado a él, y logré salir con vida. Mi mente y mi consciencia no me dejan dormir tranquilo, y dentro de mì sigo con el profundo pánico de que los horrores que viví vengan a cazarme. Me está volviendo loco la desesperación, así de que antes que el velo de la locura me nuble la mente, decidí escribir lo que viví ahí, como un recordatorio a toda la gente que no cree en lo sobrenatural que siempre hay algo que se escapa a nuestra vista, y que no porque no podamos verlo no significa que no exista.
Tómenlo como deseen. Si quieren verlo como una realidad, adelante, y si piensan que es nada más producto de una mente torcida y maníaca están en todo su derecho. Lo que sí les advierto es...
Nunca subestimen el poder que tienen las leyendas. Aunque suenen muy exageradas siempre tienen algo verídico... La mente humana puede imaginar muchísimas cosas.
Mis amigos y yo Siempre hemos sido muy curiosos. Desde niños siempre quisimos saber cómo funcionaba el mundo y desentrañar todos los misterios posibles.
Cuando salí de la universidad decidí entrar más en el rollo de investigación. Mi novia también estaba interesada en lo que yo checaba, así que formamos un pequeño grupito entre nosotros y nuestros amigos cercanos. Cada que teníamos oportunidad, checábamos algún lugar macabro o con leyendas. Hemos escalado montes, entrado a "casas embrujadas" y recorrido kilómetros y kilómetros de carreteras "Encantadas", dormido en cementerios. En fín, Nos volvimos algo así como un grupito de "Cazafantasmas" que en sus ratos libres retábamos al mundo espiritual a quen nos mostrara sus secretos. Todos lo tomábamos a juego... No imaginábamos los terribles sucesos, que por nuestra aparente "Invulnerabilidad", nos veríamos metidos...
Una noche, nos juntamos todos en mi casa para planear nuestra próxima aventura. Manuel, uno de mis mejores amigos, y miembro más o menos activo de la "Comunidad", nos dijo que en un pequeño pueblo de Chiapas había escuchado la leyenda de una mansión embrujada, y que nadie de los que había entrado en ese lugar había logrado salir con vida. Obviamente nos llenó de curiosidad el hecho, así que empacamos las cosas y nos fuimos para Chiapas...
Elisa, mi novia, estaba feliz, puesto que ella es de Chiapas y quería ver a su familia. Todos estuvimos de acuerdo y pasamos a saludarlos.
Ahora que lo pienso, fué muy afortunada... Tuvo la oportunidad de ver a su familia...
El pueblo quedaba casi a 6 horas de Tuxtla Gutiérrez, escondido entre las montañas. El
nombre de ese pueblo era "El salvamento".
El camino era pedregoso, la carretera se terminó muchísimos kilómetros antes de siquiera llegar a la mitad del camino para llegar al poblado, y como dijo en broma Yuri, otro de nuestros amigos: "Tuvimos que sacar el 4x4"
Elisa miraba el mapa, buscando el camino o alguna señal del pueblo. No había ninguna referencia en ninguno de los mapas que trajimos.
Cuando por fín logramos llegar al extraño lugar ilocalizable, nos dimos cuenta inmediatamente que se trataba de una comunidad muy pequeña y muy pobre. Según Elisa debían ser indígenas Tzotziles, debido al extraño dialecto que hablaban.
La mansión se alza impreriosa sobre el pequeño pueblo. Estaba sobre un pequeño monte, y podían obervarse dos pequeñas torrecillas un poco desquebrajadas.
Como estábamos exhaustos por la dura jornada de casi 20 horas seguidas manejando para llegar hasta acá, decidimos buscar un lugar en dónde descansar. Encontramos una pequeña hostería.
La dueña era muy muy anciana. Podríamos decir que su restro era un monumento a las arrugas. Su piel morena, quemada y endurecida por el duro trabajo de campo, parecía que iba a rompérsele con un leve movimiento. Su cabello era largo y compretamente blanco, peinado en una gran trenza que le llegaba hasta la mitad de la espalda. Su nombre era Rufina, y nos recibió con una sonrisa desdentada, pero afable y amigable.
Nos preguntó qué hacíamos en El Salvamento, y le contamos nuestras razones de venir. Apenas escuchó eso, se santiguó con los ojos muy abiertos, hablando en su dialecto.
"No vayan a ese lugar... Ese lugar está maldito por el mismísimo demonio! En ese lugar habita el chamuco, y se lleva las almas de las personas para que se queda cuidando su casa. Si van ahí no van a regresar nunca!"
Todos miramos a la anciana con una sonrisa en los labios. En cuántos lugares no nos habían dicho lo mismo? Siempre era el diablo, o el demonio el que tenía algo que ver con las cosas paranormales. Ya no nos asustaba tal aclaración tan choteada y quemada.
La anciana nos miraba con mucho temor y varias veces nos suplicó que no fuésemos ahí. No le hicimos caso y le pedimos que no se preocupara, que todo estaría bien.
"Van a una muerte segura!" Nos Advirtió "Qué no lo ven? No notan extraño que se contruyera una mansión así en un pueblito tan humilde como éste? El diablo lo contruyó! Fué el Demonio"
En eso tenía razón. Ninguno de nosotros lo comprendía. La mujer no paraba de santiguarse una y otra vez, combinando su dialecto con el español. Sólo alcancé a entender "Demonio, cuídales y Dios". La miré extrañado. Esta mujer se comportó muy extraña desde que le mencionamos la mansión. Le pregunté si conocí ala historia de ella, y me dijo que sí, que se la había contado su abuela hacía mucho tiempo. Le pedí que me la contara, a lo que ella se negó rotundamente, pero después de varios intentos, logré sacarle la información...
Continuará