La rosa de Guadalupe y el Cosplay

Y bueno tal cual se veía venir en la televisión el programa con «mensaje» o diciéndolo de otra forma con moraleja de la televisión de la familia mexicana, ahora trató el tema del cosplay, en otras ocasiones ya se han metido con las redes sociales, las madres solas, la drogadicción y un largo etcétera, sin embargo en esos caso no ha pasado de ser más que la platica de la loncheria o en el peor de los casos del bar donde tuvieran el programa sintonizado, en el caso del cosplay la cosa ha pegado como no recuerdo en tiempos recientes (exceptuando tal vez el caso de los Emo).

En fin que para mi desgracia no he tenido tiempo de analizarlo a fondo pero voy a utilizar partes de un excelente articulo que escribe Roberto Arteaga del Angel: Maneras de que el fandom se dispare en el pie ver. 2.0 que yo mejor titularía las formas en que el fandom se dispara en el pie recargado, pero leamos a Roberto:

Una crónica de tantas.

Al día de hoy la noticia ya no le es extraña a nadie, pero eso no evita poner el contexto: Gracias a un contacto del Twitter me entero que el lunes 1º de agosto, Televisa (corporativo de medios líder en el país) en uno de sus canales-insignia (Canal de Las Estrellas) emitió el día de ayer a las 15:00 horas (3:00PM hora del centro) un episodio relativo al cosplay en un concepto de show-dramático (cuyo inicio en 2008 resultó muy polémico y cuestionable) con lección y consejos auto-conclusiva llamado, “La Rosa de Guadalupe”.

En cuestión de horas el trailer del episodio fue subido al servicio de videos, YouTube:

Horas después de su emisión, el episodio fue emitido en el mismo servicio de videos (cortesía de Tenshi Masaki, usuario de los foros MC Anime):

Parte 1.

Parte 2.

Parte 3.

Por la boca y por sus dedos, mueren.

Las reacciones desde el lunes al día hoy, no se hicieron esperar. La noticia se propagó en redes sociales (panacea de la comunicación, algunos y Espada de Damocles, según otros) y la virulencia trajo en respuesta reacciones hasta cierto punto comprensibles, pero entre comentarios del valor de un diamante, el mar se llenó de comentarios prejuiciosos, groseros e incluso amenazantes.

Paso un momento al lado histórico: Televisa (mal que bien -mal-) ha llevado la batuta en cuanto a contenidos para el público mexicano por décadas, con una política que su a fundador, Emilio Azcárraga Milmo, lo ha perpetuado más allá de la muerte:

México es un país de una clase […], muy jodida… Que no va a salir de jodida. […]

Más allá de lo que piense al respecto sobre la televisora de Chapultepec, en este momento estoy de acuerdo con parte de la frase arriba expuesta, y es que, me cuesta trabajo mirar hacia el panorama sin quedarme perplejo. Esos jodidos que en la virtud de la ignorancia, del prejuicio, de la amenaza y de la exageración, validen con estos ejemplos la frase anterior:

Sin olvidar mencionar algunos grupos de Facebook que se crearon en el calor de las sin-razones y en cuyas escaramuzas podrás encontrar respuestas pensadas y viceversa, las encuestas en línea pidiendo un boicot a la televisora, las manifestaciones en el estado de Puebla (y en otras partes del país –datos confirmados-).

Algo que reconozco a lo largo del año es que tanto Televisa como Televisión Azteca (enlace a discusión en Facebook) han puesto al aire más de un reportaje sobre el mundo del cosplay (en Primero Noticias / en Hechos A.M. >> discusión del tema en mi muro en Facebook con 2 de los entrevistados en el reportaje). No descarto la posibilidad que la producción fijara su interés en la producción del episodio.

Algunas personas han querido relacionar el haber llegado a este punto con el caso de una cosplayer que, por respeto en los pasillos de este palacio a su privacidad, no diré más que condenar a esas personas por querer buscar el hilo negro ante sucesos que PARA NADA tienen que ver, y los exhorto a que se reserven esos comentarios.

Ahora, dejemos algo en claro: Todo lo que ocurrió en las últimas 72 horas tiene antecedentes, donde la irresponsabilidad en el momento de expresar una idea en las herramientas de la web 2.0, las olas tremendas de respuestas “al vapor” del momento y el sentir anímico-belicoso del colectivo al que se pertenezca fueron los factores que tomaron de pretexto periodistas como Ciro Gómez Leyva y sus críticas contra Twitter, la condena por parte de sus colegas en Tercer Grado a Facebook y la red antes citada y el caso Esteban Arce contra la comunidad LBGT, ocurrido un tiempo antes que las primeras mencionadas.

Mientras el resto del mundo vive una suerte de ateneo digital, en nuestro país tenemos que lidiar con personas que desde su sitio como líderes de opinión, influencian a millones de personas (sus padres, sus tíos, sus hermanos…) y que solo por momentos se fijen en el eslabón más delgado de nuestro tejido social (las minorías). Ellos buscan el más mínimo pretexto para ponernos en jaque y repetir una versión 1.0 que escaló de manera tenebrosa en la satanización del anime y el manga.

De esta manera, solo tuvo que bastar con un episodio de un concepto reciclado de melodrama emitido por una televisora con una calidad de contenidos sectaria, ustedes hayan demostrado todo lo contrario al reflejar los defectos, los vicios, todo en detrimento de la imagen y la credibilidad que algunos poseen en el medio y dando certeza a la entera ignorancia del valor que tiene una opinión hoy en día en Internet.

Lo más deprimente del asunto es que el vendaval de esas 72 horas sea la reacción de una nueva juventud a la que le importa poco y que por inercia de una errónea reacción, le siguen por “ser cool”. Es horrible al final saber que yo y otros, tengamos razón.

… Ok (-_-), ¿y la ‘telenovela’?

Una joven que junto a su madre sufrieron el abandono de su padre/esposo. La madre superó ese bache en su vida, pero su hija no corrió con la misma suerte ya que al no tener el apoyo en su situación, tuvo que aferrarse a lo único que podía mantenerla lejos del sufrimiento por haber crecido sin padre: ¿Las drogas?, no. ¿El alhocol?, tampoco. ¿La prostitución?, no es el caso… Fue el cosplay, un fenómeno derivado de quienes gustan del manga, el anime, el cómic o los videojuegos.

Al paso de los minutos se observa el problema de la incomprensión, la ignorancia y la intolerancia por ambas partes (tanto la joven que vive en su paranoia como sus compañeros de preparatoria donde incluso uno de ellos, intentó manosearla). En lo personal felicito a la actriz que personificó a la abuela de protagonista, ya que fue el único que tuvo el desempeño más ecuánime en el episodio.

El final es tan… Extraño, que me deja un cúmulo de dudas: Comprendo que la moraleja de la historia es la tolerancia, incluso puedo pasar por alto los últimos esfuerzos de la madre de la protagonista por sacar del viaje en narcóticos pero, ¿en qué parte de la historia, la joven cambia los motivos de comportarse así y los sustituyó por el asunto de la libertad de expresión y el respeto juarista a uno mismo y a los demás?, no digo más porque sería darle más poder a esto que ya me tiene desde el lunes.

Concluye, porque ya me aburriste -_-U

Ahora, mi shit-storm: ¿Cuándo nos convertimos en una tribu urbana?, siendo que para los fines de la industria cultural (gracias Alexei n_n) y en un sentido estricto nosotros somos una SUB-CULTURA. ¿En qué momento de los 15 y tantos años que lleva la afición de existir en nuestro país, se llegó a la conclusión que el manga, el anime y sus derivados son cosa exclusiva de las grandes urbes? Puedo seguir diciendo misa, pero hasta personas como un servidor saben que ese papel, se les deja a los expertos (que tendré en mis menciones n_n)… Eso, y que los guionistas hicieron bien su trabajo.

¡UN MOMENTO!, ¿escribiste “bien”?… ¿De qué lado estás entonces?

Es correcto. Escribí que esas personas hicieron un buen trabajo, porque solo les bastó tergiversar algunos conceptos básicos en los guiones de los actores y actrices de un paupérrimo programa de televisión para hacer que tú, y tú y tod@s l@s que se consideran parte de este colectivo, reaccionaran en plena justificación a lo mostrado en ese episodio, tanto así, que tengo mis dudas acerca de restarle mayor credibilidad a la estampa que plasmó en millones de televisores en nuestro país.

Tuvimos el poder para mostrar el respeto y la entereza que como ‘comunidad’ [presumen] tener, y lo desperdiciamos a más no poder. Debería sentirme avergonzado por pertenecer a este grupo de intolerantes solo por el mismo riesgo de que se me tilde de intolerante, pero todo lo contrario: Sobreviví hace 10 años de ese disparo en el pie que me dieron, y sobreviviré a este si se da el cauce de las cosas como algunos ya no suponen, sino temen.

Termino esta entrada con una cita de alguien que a pesar de empezar una convivencia accidentada, al final es uno de los amigos más estimados que este blogeer de WordPress ha tenido:

Todo este despliegue de comentarios y entradas [hasta el día de ayer] solo demuestran lo que el mismo show demuestra: El hobby esta en la perdición porque los fans se niegan a verlo seriamente.

… Aunque en la ironía de sus palabras, se encuentra la única solución a nuestro problema. Buenas tardes.

Publicado originalmente por Roberto Arteaga del Angel en Desde El Palacio Valhalla el 4 de agosto de 2011.

Comments

comments

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.